domingo, 1 de septiembre de 2019

Te espEro en CasA



Esta mañana saliste muy temprano, ese beso tierno en mi mejilla lo percibo recién y lamento no tenerte cerca para devolverlo con creces, pero bueno asumo que la jornada tuya de hoy será muy compleja, van mis buenas vibras, pero recuerda que acá en casa te espero.

Saberte existiendo me tiempla el genio y esperanza mi día, mi vida, saber que a cada finalizar el sol, llegar a casa tiene en ti mi recompensa me hace recordar que soy feliz. No había podido identificar en esas cosas pequeñas de la convivencia los regalos más grandes que te da la vida, el comer acompañado, a veces sin palabras, pero con mil sonrisas, el escuchar la misma canción y cantar los coros al unísono sin haberlo planeado, el tu lavar y yo secar los platos, el poder quejarme abiertamente de mis males, obteniendo tu abrazo cariñoso y silencioso mensaje de optimismo, el llevarte un té a la cama, el recibir chocolates en la boca y de tus manos, el reclamarte desnudo frente a la ducha para que te des prisa, el rogarte que te afeites e ignorarte cuando me pides lo mismo, sabiendo que no enojarás, el tenerte sentado en el patio leyendo mientras riego las plantas, el acomodarte el cuello de la camisa cuando huyes de mi apurado, el iniciar los besos sabiendo que tu no pararás hasta tenerme tuyo, desnudo en la cama o donde sea y hacernos el amor el uno al otro, reconociendo nuestros rincones, evitando nuestros zonas vetadas, sazonándonos  con palabras sucias, y asegurándonos de cruzar la meta, a veces juntos otras uno tras otro, pero siempre tras ella, esas cosas simples hacen que te extrañe las horas que no te veo, que odie estar dormido cuando estampas ese beso en mi mejilla cada mañana como la de hoy, pero tengo esas recompensas simples, que no cambiaría por joyas, autos ni viajes, ni por otro, porque es a ti a quien amo.

El día pasará rápido, tengo también mil cosas que hacer y eso alivia el extrañarte, solo recuerda aquello que yo tengo presente siempre, te estoy esperando en casa, que cuando el sol abandone el cielo dando paso a la noche, sabrás que jamás en adelante esa noche será solo tuya, que desde siempre ya, será nuestra, para seguir disfrutando de esas recompensas simples que nos da la vida.