lunes, 12 de septiembre de 2011

GustOs...

Gustos…

 
Jano 16 años

Cuando esté con un hombre por primera vez me gustaría que sea maduro, como de 24, alto y un toque fuerte, que me haga feliz, que tenga un cuerpo de gimnasio, la barba crecida y sea ligeramente velludo, que me lleve a bailar, me invite unos tragos, me lleve a su cuarto o a un hotel, me desnude con suavidad, me coma a besos, y me haga el amor suavemente, que pase la noche conmigo, y al amanecer me prometa volverme a ver, y sea solo mío.



Gabo a los 19

Quiero un hombre de verdad, no de esos que dicen ser activos y te tocan más delicados que una flor, suenan a estafa, alguna vez hasta me sorprendieron con ropa interior de encaje y demás delicadeces, no lo quiero muy grande, hasta los treinta se ven bien, alto, delgado, y sin vello, de labios delgados, y pelo corto, me gustan las nalgas duras y las piernas fibrosas, y en la cama, que disfruten de mi, que aprovechen estas formas que el gimnasio a moldeado, que me agarren el pene mientras me penetran, que muerdan mi espalda sin marcarme, y que les quede animo para repetir la faena una y otra vez.



Juanjo 24

Hoy me desencanté de Luis, ya me cansé de verlo tan seguido, si no fuera por Martín y Robin, que aburrida sería mi vida, Luis tiene el cuerpo perfecto, y se deja hacer de todo, pero eso es lo que me cansa, no pone de si, está bien que sea yo el activo, pero tampoco, tampoco pues.. si Martín no fuera tan delicado, sería perfecto como para algo serio, y si Robin que es machito e inteligentón, y no fuese tan feo de rostro, arrancaría con él. Ya llegará el hombre perfecto.

Marco 30

Adoro amanecer junto a Francisco, adoro su aroma por la mañana, hasta ese aliento acidón me conmueve, sus formas jóvenes y trabajadas, su timbre voz cuando me canta, y hacer el amor con él, es como danzar tras el ensayo diario, fluido, rítmico, mirar su rostro cuando estoy en él, verlo morderse los labios mientras esboza una sonrisa, no me veo sin él, no existo sin él.

Joseph 36

No hay como un chibolo, entre los 20 y los 25, duros, y agiles, que sepan lo que quieren, pero que se dejen hacer lo uno quiere, en fin uno los compensa, que te besen con fuerza, que te cojan de los hombros fuertemente, mientras te penetran estando de pie, que sean suaves pero marcados por el ejercicio, sentir su arremetida agitada, y su respiración sobre mis hombros susurrándome alguna que otra grosería mientras lo hacen es lo máximo.

Diego 46

Lo extraño tanto cada vez que sale de viaje, su trabajo es terrible, pero lo compensa con creces cada vez que retorna, me conoce tan bien que no tengo ni que darle mis tallas, ni especificar el color de lo que me compra, sabe a que huelo y siempre acierta en los perfumes, me lee la mente cuando me compra un libro, y lo mejor es que yo he conseguido hacer lo mismo para él, si eso es amor, ando enamorado desde que lo conozco, desde que decidimos vivir juntos, desde que amanezco a su lado y soy solo de él y para él.

Felipe 65

Su partida solo me deja con la ilusión de reencontrarlo, quiero devolverle todos esos besos que me dio estos años, creo que me besó mas a mí que yo a él, así que esa está pendiente. Me hizo feliz, y no sé si conseguí lo mismo en él.





1 comentario:

  1. Maravilloso post! Ojalà todos tuvièramos esa experiencia en la vida, madurando hacia el Amor por otro ser.

    Abrazos mágicos y púrpuras.

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